La semana pasada hubo dos coletazos políticos que se
originaron en el frente externo y que pueden tener implicancias para la macro
local: Trump bajo escrutinio por su vinculación con
Rusia y Temer bajo sospecha de escándalos de corrupción. Aunque todavía es
prematuro acertar con precisión cuán fuertes pueden ser los coletazos, el
segundo requiere de mayor atención, pues sucede en nuestro vecindario y afecta a
nuestro mayor socio comercial. Los canales de transmisión de un shock externo
desde Brasil son básicamente cuatro:
Tipo de
cambio: el real se devaluó más de 8% el día del
anuncio de la investigación a Temer, aunque al día siguiente la moneda brasileña
se revalorizó 3%. El Banco Central de Brasil tuvo que acelerar sus licitaciones
de swaps de moneda (equivalente a los futuros de Rofex o MAE locales) y ya intervino
por un monto de USD 6.000 millones. Su mensaje es que neutralizará cualquier
incremento de "volatilidad política" con mayor estabilidad cambiaria.
Punta contra punta, el real saltó 5% desde 3.15 a 3.30 frente al dólar. En el
mismo período, el peso argentino replicó bastante bien ese movimiento y se
debilitó de 15.60 a 16.20.
Canal financiero: la crisis política en nuestro vecino no tendrá efectos sobre las tasas
de los Treasuries. El peso de Brasil en el PBI mundial es apenas 2.4%. No
obstante, el riesgo país argentino acusó el recibo, aunque la suba fue más bien
marginal de 398 a 420 puntos básicos. No vemos que haya mucha más corrección
por delante, en tanto creemos que el riesgo argentino seguirá influenciado
relativamente más por lo que suceda con la tasa de los Treasuries.
Precio de
materias primas: desde el comienzo del Temer-gate
los precios de los granos se mantuvieron firmes, con trigo y maíz mostrando
subas de más de 1% y la soja casi sin cambios. Al tratarse de un evento externo
"micro", no se registraron penurias mayores.
Actividad: antes de estos eventos, la previsión de crecimiento de Brasil rondaba
el 0.6%. No obstante, han aumentado los riesgos a la baja, en tanto ningún
empresario es amante de la incertidumbre y los animal spirits seguramente se
quedarán agazapados a la espera de cómo sigue la saga. Tampoco parece que sean
gratuitos para otros socios regionales, aunque es apresurado por ahora prever el
impacto. En nuestro país, es posible que se demore la recuperación de las ramas
automotriz, química y siderúrgica.
En la medida en que la crisis en Brasil no se desmadre,
la oxigenación del mercado cambiario puede ser valiosa para moderar la reciente
apreciación del peso. Sin embargo, es difícil que el oxígeno dure para siempre,
en tanto para los amantes del "carry trade" se puede estar gestando
un mejor punto de entrada y los fundamentals para un peso fuerte siguen estando
en el fondo de la escena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario